"Todas las familias felices se parecen; pero cada familia infeliz lo es a su manera"
L.Tolstoi
La terapia familiar parte de la premisa que las relaciones familiares son básicas a la hora de entender las crisis y bloqueos de los individuos.
La terapia sistémica familiar tiene la ventaja de ser mas breve que las terapias convencionales, siendo en algunos trastornos como las adicciones o los trastornos de conducta en la infancia, o en momentos críticos, como el paso de la adolescencia a la edad adulta, extremadamente efectiva.
Marco sistémico por antonomasia, los conflictos son abordados directamente en su lugar de origen, de forma que se precisarán menos sesiones y la duración de tratamiento se
reducirá.
El enfoque sistémico va mas allá de los diagnósticos -que son categorias meramente descriptivas- y no fija los "problemas" en un único sujeto; en todo caso hablamos de un "portador" o "persona índice".
Este cambio de perspectiva tiene un efecto exonerante para la persona que hasta entonces posiblemente se haya sentido "responsable" de la situación. Lejos de buscar nuevos culpables, el enfoque sistémico se centra en encontrar modos de relación y comunicación más adecuados.
Interesante es que los participantes estén dispuestos a hacer, tambien, autocrítica.
Miedos y obsesiones en la infancia
Problemas de agresión
Adicciones
Trastornos psicosomáticos
Dependiendo de la gravedad del trastorno puede ser necesario complementar la terapia con algún tipo de tratamiento individual.